Fue en septiembre del 2018 que el futbolista tuvo un malestar en su brazo después de los ejercicios en el gimnasio. Habiendo comunicado a su doctor, observó unos moretones anormales en el brazo, con lo que decidió mandarlo al hospital.
El resultado del examen, en el hospital, fue una forma severa de trombosis que puso su vida en peligro
“Le hicieron las pruebas necesarias y tuvieron que operarlo de urgencia porque se le había desarrollado una trombosis en una vena. “Su vida estaba en peligro. No fue fácil. Le dije: ‘Santi, a mí me da igual si juegas o no, a mí me importa tu vida’. Dijo que sólo quería jugar al fútbol. Gracias a Dios la trombosis no llegó a los pulmones ni a la cabeza, porque entonces la historia sería diferente”, dijo su padre, Christian Giménez, ex jugador del Boca Juniors y Cruz Azul.
Santiago se vió obligado a someterse a tres operaciones médicas. Y una de estas intervenciones fue la colocación de un stent en la vena dañada. Todo esto fue causa de una intervención quirúrgica en la cuál se insertó un tornillo en la clavícula del deportista que originó la trombosis.
Hay un post especial que Santiago publicó en su perfil de Instagram en el que muestra una imagen en la cuál se le puede apreciar leyendo la Biblia, y aprovechó la oportunidad para expresar su relación con Dios y sobre su conexión espiritual.
“Mi relación con Dios no se trata de religión, ceremonias ni ningún ritual, se trata simplemente de una gran amistad. Lo más importante para mí para mantener esta relación es la comunicación constante. Le habló a Jesús a través de la oración y dejó que Él me hable a través de la Biblia”, dijo Santiago.
Fuente: 1.cbn.com
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