El pastor Wang, autor de más de 10 libros cristianos, se ha dedicado por décadas a la evangelización en casas de China. Desde 1998, cuando él, su esposa y otros líderes de la Iglesia empezaron a ministrar a un grupo de creyentes, la iglesia que pastorea ha crecido de 100 miembros a más de 50 000.
Lo que sorprendió a los funcionarios del gobierno local fue que 100 cristianos de la Iglesia mantuvieron la auténtica fe cristiana a pesar de la persecución constante y prolongada. Se negaron a unirse a la Iglesia de los Tres Seres (Tres Yoes) y a registrarse en la Oficina de Asuntos Religiosos. En consecuencia, las autoridades del PCCh hostigaron y reprimieron a los miembros. Desde 2004, los funcionarios del gobierno local han cortado con frecuencia el suministro de agua y energía.
En 2009, aproximadamente a las 3 am, las autoridades del PCCh del condado de Fushan ordenaron a más de 400 policías allanar la Iglesia Golden Lampstand y su fábrica de zapatos evangélicos. El 7 de agosto de 2017, la policía arrestó a nueve líderes de la Iglesia Golden Lampstand, incluyendo el pastor Wang Xiaoguang, que anteriormente había estado encarcelado durante tres años, y su esposa, Yang Rongli, encarcelada antes durante siete años.
En setiembre de 2017, cuando los funcionarios de Linfen comenzaron una campaña masiva para atacar a los líderes de la iglesia, también convocaron a los líderes chinos de otras iglesias afiliadas a la Iglesia Golden Lampstand para interrogarlos. Los miembros de Golden Lampstand Church, una iglesia en el condado de Fushan, donaron dinero para construir el edificio de la iglesia. Sin embargo, un equipo de demolición local del Partido Comunista Chino (PCCh) bombardeó el lugar de culto el 9 de enero de 2018.
La policía golpeó brutalmente a los cristianos que dormían en sus apartamentos, hiriendo a más de 80 personas hasta el punto de que algunos perdieron el conocimiento y necesitaron atención médica de emergencia. Las autoridades contrataron tractores y excavadoras para destruir edificios. Muchos cristianos que vieron la demolición lloraron desde la distancia. Esa tarde, más de 50 000 cristianos se reunieron frente a la oficina del gobierno del condado para orar por las autoridades y pedirles que se arrepintieran.
En 2021, los funcionarios del gobierno iniciaron otra ronda de arrestos masivos contra líderes de la Iglesia. El PCCh aumentó su persecución de las iglesias en las casas. Las autoridades están apuntando a los cristianos que optan por «adherirse» a la fe, aquellos que se niegan a abandonar el Evangelio de Jesucristo, a pesar de la persecución del PCCh.
Fuente: Impactoevangelistico.net
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