Hoy en día los padres mantienen una intensa lucha para proteger a sus hijos de la ideología de género, una lucha que reconoció el pastor John Piper, quien con 6 razones fundamentadas en la Biblia instó a los creyentes que tienen niños a ser firmes en este tema.
Dentro de su podcast “Desiring God”, el pastor John enumeró 6 razones bíblicas por las que los niños no deben vestir contrario al género que Dios les asignó; todo comenzó por un usuario que le plantó un caso donde una familia de creyentes deja que su hijo use vestidos.
“Parece que lo dejan elegir la mayoría de lo que quiere hacer. Nosotros, por supuesto, vemos mucho peligro en este método parental”, introdujo el usuario como presentación del caso, quien detalló que la familia pertenecía a otra iglesia, pero que por el mismo hecho fue retirada de la congregación.
«¿Cuál sería su enfoque para ayudar a estos padres con las Escrituras sobre este tema?», le preguntó al pastor.
En respuesta, Piper dio una serie de realidades bíblicas que alientan a los padres a que estén bajo la luz de la palabra de Dios y en base a la fe, se ajusten las estrategias que aplican a la crianza de sus hijos.
La primera fue en base a Génesis 1:26, que explica como Dios solo creó Hombre y Mujer.
“Dios no creó un ser humano genérico diseñado para elegir su sexo . Él creó a los hombres para que fueran hombres y a las mujeres para que fueran mujeres. Los niños y niñas deberían aprender esto desde el principio de sus vidas como algo grande y maravilloso”, comentó.
La segunda razón citando Génesis 2:24, es que Dios creó a estos dos únicos géneros para que en unión perfecta pudieran dar fruto de cómo se complementa el matrimonio, en base a la hermosa visión de Dios.
“Dios creó al hombre, varón y hembra, para que hubiera una hermosa, feliz y fructífera complementariedad en el matrimonio. Ya sea que se casen o no (en la providencia de Dios), debemos criarlos con la convicción de que la diferencia entre niños y niñas está diseñada para este hermoso resultado, la unión de una sola carne en el matrimonio de un hombre y una mujer”, agregó.
“Ahora, el diseño de Dios de la unión en una sola carne del hombre y la mujer en el matrimonio en el acto sexual es una confirmación de que la forma en que nos creó no es despreciable. Era parte de su plan para nuestro bien, para llenar la tierra, para nuestro gozo, para nuestro disfrute. Los niños y niñas deben ser educados para ese resultado natural de su sexualidad”, reiteró.
En tercer lugar, el pastor citó a Efesios, Timoteo y Colosenses, diciendo que para Dios es tan importante esta parte de la humanidad, que en base a ello ha dado el liderazgo.
“En 1 Timoteo 2:12, él asigna a los hombres la autoridad de enseñar y de gobernar en la iglesia. Y en Efesios 5:22–24 y Colosenses 3:18–19, atribuye la jefatura de la casa al esposo y padre. La fuerza natural superior de los hombres se destaca en 1 Pedro 3:7 como una razón por la cual las mujeres deben recibir un honor especial como vaso más frágil, así como otro tipo de honor como coherederas de la gracia de la vida. Hay que educar a los niños con la conciencia de que su sexualidad importa mucho y de esa manera”, explicó.
Como cuarto punto, instó a los padres a siempre animar a sus hijos a respetar su género y a no adoptar otros estilos que no sean adecuados a su sexualidad.
“Deben animar a sus hijos a no adoptar formas afeminadas de vestir o actuar; y no deben alentar a sus hijas a adoptar formas masculinas de vestir o actuar. La Biblia advierte a los niños y hombres, por ejemplo, contra el afeminamiento en 1 Corintios 6:9. Deben moverse en contra de peinados culturalmente confusos, por ejemplo en 1 Corintios 11:14, y Deuteronomio 22:5 advierte a hombres y mujeres contra el travestismo”, dijo.
Con Efesios 6, el quinto punto de Piper es que la disciplina debe ser fundamental en la crianza de los niños y también la amonestación, “esta instrucción, con respecto a la sexualidad, abarca al menos estos cuatro puntos anteriores».
Y por último, el pastor dice que es necesario que la iglesia recalque en este tiempo que existe una lucha por proteger a los niños de ideología de género, el tema debe ser tratado como una urgencia especial.
“Si ellos, los padres, no ayudan a sus hijos de manera natural y feliz a crecer hasta convertirse en hombres maduros o mujeres maduras, pueden estar sirviendo a una ola de rebelión cultural contra Dios, que no solo es destructiva para sus hijos, sino también para sus hijos. El mundo en general”, finalizó.
Fuente: Christianpost.com
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